domingo, 15 de diciembre de 2013

"Hasta donde la adicción a la pasión puede llevarte. Entrevista con un mimo"



Es posible que ya lo conozcáis. En las esquinas de las calles este artista está diseñando las paredes, cogiendo a lazo los transeúntes, dando balones a niños o flores a chicas, siguiendo mariposas… de hecho juega con las imaginación de cada uno, calentando los corazones cerrados, iluminando tu día de la generosidad de su risa… y esperando solamente compartir un poco de felicidad, dar una performance de cualidad y recibir a cambio alguna moneda.

Este mimo tan modesto en lo que pide, en el pensamiento que da, en su manera de vivir, tan grande de libertad en su alma, tiene un loco camino de vida y un montón de historias que contar, incluso, con palabras. Yo tuve la suerte de escuchar al mimo Fabio.

Nació en Brasil e hizo estudios universitarios de Historia… Pero focalizarse sobre el desarrollo único de la cabeza no le apetecía. Algo faltaba. Bajo este sentimiento, empezó en una escuela de artes escénicas… y desde ese momento no dejó colgado el teatro, la comedia, el payaso, el mimo, la danza, etc. Trabajando con los más grandes de la disciplina y construyendo así, poco a poco, una carrera muy completa… Mismo hasta que pudo aprovechar el título oficial de artista de mímica en Brasil, que es muy complicado acceder y hay que pasar una prueba de nivel. Ha viajado de Brasil a Bélgica, pasando a San Paolo, a Holanda, a las Alpujarras y terminando ahora en Granada… pero nada dice que se va a quedar aquí, ya Madrid es sobre la lista.

Ser artista de la calle en Granada, cuenta Fabio, no es fácil en el día a día. No podemos ocultar la importancia de las relaciones entre los artistas de calle y los policías. También, cuenta con un montón de historias entre los diferentes artistas. Y es que los sitios buenos en el centro de Granada se pueden contar y, por eso, los artistas luchan para tenerlos. Me cuenta las mismas historias con los vendedores de calle, los envían a los mismos sitios. Sí, hay como una búsqueda por los transeúntes… porque al fin y al cabo los artistas y vendedores tienen que poder pagar para vivir. Para nuestro mimo, 5,50€ es la necesidad vital, la media de su salario por día es de unos 10€. Ahora vive en una cueva acondicionada de sus manos, no hay luz, electricidad, calefacción, agua…

Pero es feliz. ¿La llave? Vivir su pasión: hacer reir. Como le ha dicho uno de sus grandes profesores, una vez que estas dentro del mundo de la risa, no puedes salir, es una adicción. A él, le encanta regalar una sonrisa a cada una de las personas. Ser artista de calle, es vivir en directo el contacto con la gente y hacer de ellos tu día a día, tu mundo. Los niños son el mejor público, dice Fabio, son curiosos, tienen tiempo y son más abiertos a lo que hay fuera de la cabeza, a lo que pasa alrededor de uno mismo, todavía les gusta jugar, les gustan las sorpresas de cada momento del día. Hoy, Fabio es satisfecho de su vida, no tiene preocupación porque ya conoce su trabajo, y aún está aprendiendo gracias a sus nuevas experiencias de la calle, y sabe que siempre puede mejorarse, esa es la llave… y tener sueños. ¿Su sueño? Estar trabajando en un circo o tener un lugar donde la gente pudiera ir para disfrutar de sus presentaciones y no sólo un lugar donde a veces puede recibir algún “gracias” amable.Así ya lo conocéis un poco.

Si queréis saber más sobre como está viviendo de su profesión, aquí podeis acceder directamente a su propia página web:
mimoalegretto.blogspot.com.

Si un día os lo cruzáis en la calle, no olvidéis saludarle, de deteneros a mirarle o de decir “gracias y que pases un buen día”, de unas moneditas...

martes, 26 de noviembre de 2013

“ARTESANÍA EL DUENDE”

Si hablamos de arte hablamos también de artesanía y si hablamos de artesanía debemos nombrar a Pedro y Pilar. Pedro artesano desde hace ya 20 años ha compartido este oficio con otros dedicándose también a la construcción, la fontanería y la jardinería. Debido a la crisis la cual a afectado gravemente a estos tres sectores ha decidido centrar su vida en lo que mejor se le da, la artesanía. Y ello lo hace junto con Pilar, quien hasta hace poco ha estado ejerciendo su profesión como integradora social compaginándolo con la artesanía y, en la actualidad, se dedica a esto último plenamente siendo su ayuda imprescindible para Pedro.

Principalmente sus productos se centran en el cuero con el cual hacen pulseras, colgantes, carteras, collares, bolsos, pitilleras o fundas de navaja entre otros utensilios. Pero encontramos a su vez entres sus productos artículos de plata (pulseras, anillos, pendientes, colgantes…) o madera (anillos, pendientes, figuritas decorativas) que también trabajan ellos mismos y figuras de decoración hechas con látex líquido y pintadas a mano. Además de ello venden numerosos artículos para el fumador, banderas, pañuelos o pósters y decoran libretas, capetas, bombillas… Pudiendo ser éstas personalizadas al gusto del comprador.

Dichos artistas llevan vendiendo sus productos en puestos en la calle desde años dejándose caer principalmente por ciudades y pueblos de Andalucía, sintiendo predilección por Granada, Córdoba y Jaén. En la actualidad, aunque también siguen compartiendo su arte con la gente en las calles, han abierto un negocio en donde vender sus productos en Jaén capital. Así que si alguno de vosotros o vosotras pasáis por Jaén no os podéis olvidar de visitar la tienda “Artesanía El duende” situada en la calle Navas de Tolosa en la galería comercial LIS PALACE, muy cerca de la estación de autobuses. Para que os hagáis una idea de lo que podéis encontrar en dicha tienda y en sus puestos en la calle aquí os dejamos algunas fotos.



miércoles, 13 de noviembre de 2013

Cuando la guitarra roza el alma…


Dejarte llevar por acordes improvisados, transportarte a un atardecer en la India o a un barrio andaluz de los que inspiraron a los mejores artistas de flamenco, reconciliarte con tu caos interior y que de repente todo sea armonía, apreciar matices que te hacen sonreír y suspirar de gozo, desafiar al oído con sonidos que parece imposible que salgan de una guitarra, cerrar los ojos y… hacer el amor con la música, lenta, intensa, delicadamente…

Sensaciones que se experimentan al escuchar a David, un artistazo granaíno que con sencillez y talento a partes iguales, hace de la guitarra algo más que un instrumento. 

Al hablar con él te das cuenta de que vive por, para, desde, (y todas las preposiciones posibles) la música. Sus canciones van más allá de un flamenco puro o una buena fusión, él lo llama "soltar energía", pero nosotros cambiamos "soltar" por "regalar", porque la energía que desprenden él y su guitarra crea un clima mágico. 
Nos cuenta que desde pequeño la música define sus días, y que vivir de ello es un reto que no es tan fácil como muchos creen. En su cueva de Sacromonte dedica tardes enteras a sacarle más partido si cabe a las cuerdas de su guitarra, sonidos y ritmos que una noche cualquiera de martes muestra al mundo con pasión. 

Desde aquí, David, te pedimos que nunca dejes de impregnar con tu arte los recovecos de Granada, y que mientras llega ese toque de suerte sutil que los artistas como tú merecen, te conformes con saber que hay personas a las que les arreglas el día al llegar a casa, encender incienso y algo más, y simplemente escucharte…




                                                                                               

jueves, 7 de noviembre de 2013

La calle, barullo metamorfoseado en coches, trenes, taxis y autobuses. Un despertador, un reloj marca tus movimientos: prisas, atascos y semáforos. Gente que pasa a diario, pequeños intervalos de minutos y segundos, mentes apresuradas y pasos aún más rápidos.

Pero entre todo ese barullo hay pequeñas personas que deciden girar a un compás más lento, disfrutar de cada segundo y hacer vibrar las emociones de todo aquel que observe. Me refiero a las personas llenas de arte que hay en cada rincón... Sí, ese cantautor que tiene por vida su guitarra, la bailaora que hace temblar el suelo, aquel que con cuatro colores da vida a sus pinceles, ese poeta bohemio con aires de Neruda o el acróbata que vive en el aire.

No es difícil encontrarlos, no están escondidos, tan sólo se trata de parar los cronometrados pies y mirar alrededor. Son capaces de todo, acrecentar la alegría de un instante, exaltar el placer de cada movimiento, sacar una sonrisa deslumbrante, acompañar el mejor pensamiento, extasiar todos los sentidos existentes...

No buscan fama, tampoco dinero, ni ningún reconocimiento, ni siquiera aplausos. Sólo los ojos que se crucen con sus miradas, la ilusión de una sonrisa, la alegría de sentir el calor de las personas. Son vividores de sueños, regalan su arte, pequeñas sensaciones son las que guían sus vidas. Detén tus pies y observa.


Amaia Sáenz